En estos momentos varios problemas se presenta en mi entorno personal, uno tras otro, y no hay tregua, parece que es algo interminable.
Por suerte, tenemos la suerte de poder disfrutar de este deporte llamado F Ú T B O L, quizás lo mejor que nos dejó la historia en cuanto a materia deportiva. El mundial está que arde, y después de más de cien años de fútbol, España podrá, al menos, ser tercera en un mundial, tener un bronce, no ser simplemente aquellos mindundis a los que se les robaba una vez sí y otra también. Ganamos la Eurocopa y eso nos otorga un prestigio, que a su vez proporciona privilegios. Imponemos respeto, y eso se nota, observas al contrario atenazado, sabiendose perdedor de un combate que dura noventa minutos, ciento veinte si se resisten, pero que acabará inclinandose del lado ibérico.
Hablando de ibéricos, pido perdon a nuestros hermanos portugueses, pero no se preocupen, aquí estamos para brindarles la copa dentro de diez días. Estoy seguro de que ganaremos a Alemania, y estoy seguro de que ganaremos a Uruguay, aunque eso no lo tenga tan claro, pero espero que mis compatriotas, al menos de idioma, hagan un homenaje a tantos años sin ganar un título, y recordando al hombre de cuyo nombre me he apropiado, ganen a Holanda. Y si por desgracia a los germanos les diera por ganarnos, que honraran la lengua hispana haciéndoles pagar por tan horrible "mérito", dejarnos fuera del mundial.
Por otro lado... cuántos y cuántos nombres nos deja este mundial... cuantos y cuántos jugadores han sido seguidos en este evento, y cuántos de ellos serán fichados a raíz de él. Desde los mexicanos, que nos han dejado nombres realmente interesantes, el resurgimiento de Vittek como goleador, el reconocimiento internacional a Pastore, que ha aprovechado la oportunidad que le brindó Diego Armando, el "alemán" Qhedira, o Müller sin dejar atrás el papel de Klose, o Boateng,... Además el patinazo de Capello, el de Domenech, aunque este estuviera más que cantado, por no hablar de Italia, la campeona, que quedó última en la fase de grupos por detrás de selecciones de, cuanto menos, dudosa calidad, como Nueva Zelanda o Australia.
En definitiva, en épocas dificiles en mi entorno personal, afortunadamente tengo el Mundial, y vivo en un país que para mí, ya ha cumplido como campeón. Gracias España, Gracias fútbol.
Por suerte, tenemos la suerte de poder disfrutar de este deporte llamado F Ú T B O L, quizás lo mejor que nos dejó la historia en cuanto a materia deportiva. El mundial está que arde, y después de más de cien años de fútbol, España podrá, al menos, ser tercera en un mundial, tener un bronce, no ser simplemente aquellos mindundis a los que se les robaba una vez sí y otra también. Ganamos la Eurocopa y eso nos otorga un prestigio, que a su vez proporciona privilegios. Imponemos respeto, y eso se nota, observas al contrario atenazado, sabiendose perdedor de un combate que dura noventa minutos, ciento veinte si se resisten, pero que acabará inclinandose del lado ibérico.
Hablando de ibéricos, pido perdon a nuestros hermanos portugueses, pero no se preocupen, aquí estamos para brindarles la copa dentro de diez días. Estoy seguro de que ganaremos a Alemania, y estoy seguro de que ganaremos a Uruguay, aunque eso no lo tenga tan claro, pero espero que mis compatriotas, al menos de idioma, hagan un homenaje a tantos años sin ganar un título, y recordando al hombre de cuyo nombre me he apropiado, ganen a Holanda. Y si por desgracia a los germanos les diera por ganarnos, que honraran la lengua hispana haciéndoles pagar por tan horrible "mérito", dejarnos fuera del mundial.
Por otro lado... cuántos y cuántos nombres nos deja este mundial... cuantos y cuántos jugadores han sido seguidos en este evento, y cuántos de ellos serán fichados a raíz de él. Desde los mexicanos, que nos han dejado nombres realmente interesantes, el resurgimiento de Vittek como goleador, el reconocimiento internacional a Pastore, que ha aprovechado la oportunidad que le brindó Diego Armando, el "alemán" Qhedira, o Müller sin dejar atrás el papel de Klose, o Boateng,... Además el patinazo de Capello, el de Domenech, aunque este estuviera más que cantado, por no hablar de Italia, la campeona, que quedó última en la fase de grupos por detrás de selecciones de, cuanto menos, dudosa calidad, como Nueva Zelanda o Australia.
En definitiva, en épocas dificiles en mi entorno personal, afortunadamente tengo el Mundial, y vivo en un país que para mí, ya ha cumplido como campeón. Gracias España, Gracias fútbol.
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Frank
frank641w@gmail.com